Tu piel luce brillante o incluso brillante, sobre todo en verano, con imperfecciones como poros dilatados, granos y rojeces.

Soluciona esta molestia cutánea y encuentra una piel calmada y saludable adaptando tu rutina facial:

  • Limpia tu piel suavemente, un limpiador agresivo podría excitar las glándulas sebáceas
  • Regular suavemente la secreción de sebo.
  • Purifica y cierra los poros.
  • No descuides la hidratación